esa otra que soy yoesa otra que soy yo

28/8/07

punto y seguido [mis cosas]

Se acabó Ibiza pero no las vacaciones. Tras una sesión de lavadora en casa y un reajuste de maletas, a las siete y media de la mañana salimos con rumbo a Las Landas. Allí no tendré conexión así que ahora sí:

cerrado por vacaciones

27/8/07

fin de fiesta [viajes]

fin de fiesta · bongos en benirras
Nos quedaba algo por hacer en Ibiza antes de irnos: Conocer la isla en sus dos facetas más famosas.
La ibiza de las macrodiscotecas, de las copas caras, de las listas de vips y de las performances la conocimos el sábado, gracias a Javi que consiguió que entrasemos en Space por la puerta de invitados, en la fiesta Gorgeous, después de una cena a la luz de las velas en un restaurante precioso en plena D'alt Vila (con música en directo incluida).
La otra Ibiza, la de los bongos en la playa, la de los hippies que vivieron los 60, la de los malabares y las hogueras la vivimos el domingo en Benirras. Un auténtico fin de fiesta para nuestra última noche en la isla.

25/8/07

intuición [poemas]

Como la sensación del sol bronceando mi piel
o el mar envolviendo mi cuerpo desnudo de sal.
Así te amo.
Sin saber. Sin querer. Sin pensar.

Llamémoslo sensación.
Intuición.
Tal vez fe, en un futuro incierto
pero feliz porque tú te dibujas en él.

Mientras, el sol se pone cada día
y cada día vemos juntos la vida pasar,
con la certeza de saber que somos jóvenes y libres
y la intuición _sensación o fe_ de que nunca nos dejaremos de amar.

24/8/07

sobre ruedas [viajes]

formentera sobre ruedas
Si Formentera es un lugar increible, aún lo es más si lo recorres en moto, perdiéndote en sus mil calas y llegando a dónde no podrías llegar de otra manera. Además, tiene su encanto llegar al faro de La Mola, sintiendo el viento en la cara y convirtiéndote por un momento en Lucía.

17/8/07

la isla bonita [viajes]

ibiza
Tranquilidad, buen tiempo, aguas de un azul turquesa imposible, yates de ensueño, pieles muy bronceadas, diversión a cualquier hora cualquier día de la semana, gente guapa, santuarios de la música, garitos de diseño, mojitos, cahipiriñas y cahipiruskas, el sonido del mar a través de una ventana abierta, las olas contra la roca, calas perdidas, mis pies desnudos en la arena mojada... Felicidad, felicidad, felicidad...

6/8/07

desgracia [ficciones]

Quizá hubiera sido bonita si la vida se lo hubiese permitido, si cada arruga de su rostro y cada dureza de sus manos no las hubiera escrito la desgracia. Tenía los ojos oscuros y profundos, como el mar en las noches sin luna, pero hacía mucho tiempo ya que nadie la miraba a los ojos.
Esa mañana en el metro tampoco nadie la miro directamente aunque cada persona que compartía vagón con ella no podía evitar mirarla. Con frialdad, de soslayo, evitando su mirada, como si sólo con los ojos esa horrible mujer fuese capaz de transmitir su desgracia.

Tenía frío y en vano trataba de estirar su desgastada ropa para tapar sus piernas. Sonrió con una mueca al recordar a su madre años atrás protestando por sus faldas demasiado cortas y sus camisetas demasiado estrechas. Y ese pelo y esas compañías… Quizá si la hubiese hecho caso ahora no tendría tanto frío…

Mientras se recostaba en el suelo del vagón intentando taparse, cientos de personas subían y bajaban en cada estación, reparando en ella un segundo y volviendo a sus periódicos, a sus móviles y a sus vidas, con expresión de lástima en algunos casos y de desprecio en la mayoría.

Eh, tú, yonki, despierta!. Cuando los de seguridad se toparon con ella en su ronda nocturna llevaba ya varias horas muerta.

Su madre eligió para ella un largo vestido blanco y en su esquela colocó una foto de cuando en su mirada todavía brillaba la luna y cuando la desgracia todavía no se había colado por sus venas.

5/8/07

mi luz [poemas]

Te amo
porque el mundo se me cae encima
y tú persistes;
porque en este mundo sucio
tú sigues siendo la luz;
porque, cuando ya no tengo fuerzas para levantarme,
me elevas tú.

andoni [mis cosas]

Esta mañana he estado en misa. Es algo que nunca hago porque no soy creyente. No me gusta entrar ni en las bodas, así que suelo esperar fuera con esa gente que siempre se queda en algún bar cercano tomando martinis con la excusa de que no puede entrar con los niños porque hacen mucho ruido. Pero una vez al año, sólo una, entro. Por respeto, porque es todo lo que puedo hacer, aún sabiendo que no puedo hacer nada.

El martes hará ya tres años y sigo recordando la llamada de teléfono como si fuese ayer. Estaba con Asier recorriendo Andalucia. Ese día, 7 de agosto, estábamos en Huelva durmiendo la siesta cuando sonó el teléfono. Fue mi cuñado quien me dió la noticia. Nuca olvidaré su voz seria, intentando de algún modo imposible que encajara el golpe sin perder la cordura. No supe qué decir. Sólo acerté a preguntar si había sido con la moto. No, me dijo, iba en coche con un amigo... también ha muerto.

No supe qué decir. Ni en ese momento, ni cuando logré llegar a abrazar a mi familia después del viaje más triste y más largo de mi vida. Tampoco sé qué decir ahora. Sigo sin superarlo. Sin entenderlo. Sin saber cómo confortar a sus padres, mis tios, o a su hermana... o a mi misma cada vez que revivo la imagen del coche aplastado en la cuneta.

Tenía 22 años y la última vez que le ví me dijo que llevaría traje a mi boda. Él, que nunca los llevaba. Me dio un sonoro beso y me dijo 'adios, prima', con su voz fuerte, con un prima que le llenaba toda la boca. Y yo le dije 'adios, primo', imitando su acento rudo, y le ví marchar de la mano de Ana, mientras sonreía con la idea de verle con traje en mi boda...

Ahora cada año voy a su misa aunque no crea en ello. Y le lloro a escondidas de cuando en cuando, aunque nunca vaya al cementerio. Y aprieto los puños con fuerza y sigo hablando en el coche intentando aparentar normalidad cada vez que pasamos por el pequeño altar levantado en la cuneta en su recuerdo.

Hoy tendría 25 años, uno menos que yo, y toda una vida por delante.

3/8/07

la vida a mordiscos [mis cosas]

Uno a uno me la voy comiendo. Cuando comencé la jornada intensiva hace unas semana me dije a mi misma 'qué bien!, ahora podré dedicarme a esas cosas para las que nunca tengo tiempo'... Y desde entonces no he parado. Estoy aprovechando tanto mi tiempo que no tengo tiempo para nada, ni siquiera para postear de vez en cuando en el blog...

De hecho, iba a aprovechar este fin de semana, el que se suponía que iba a ser el último tranquilo antes de las vacaciones, para descansar un poco y escribir algo, pero ayer nos surgió un nuevo plan, y cómo ibamos a dejarlo pasar!... Así que, en lugar de descarsar, en díez minutos estaré camino de Bakio con unos amigos, y lo de descansar... 'ya descansaré cuando me muera'.