La celosía velada de un confesionario.
Los ojos espías, indagando.
Un secreto inconfesable desvelado.
Y el río por mi cara resbalando.
Un vals sereno, desafinado.
Los posos del futuro derramados.
La tos del pasado renqueando.
Y mi cerebro, como un loco, musitando.
Me señalarán las gentes,
se llenará mi cabeza de pájaros.
Y yo con mi locura bohemia,
y ella conmigo, desvariando.
El saber de los caminos será mío,
conoceré las historias secretas de los astros.
Iré sola por la vida, si nos separamos,
loca, por los senderos, murmurando.
16/6/10
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2 comentarios:
Muy bueno...
Un besito
Gracias, Alkerme!
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