31/5/10
el camino recto de mi vida [poemas]
me diluyo en el miedo,
la indecisión,
o la desidia;
mi mente se dispersa,
entra en pánico y grita;
sin razón aparente,
llega la tristeza,
a pesar de la dicha.
Y de pronto,
tu mano me salva de caer
al abismo de mi propio interior;
y como siempre,
tu voz me despierta y me devuelve
al camino recto de mi vida.
6/5/10
no leo [mis cosas]
No leo. Esa es mi medida de las cosas. El indicador de mi pulso vital por excelencia. El 'pienso, luego existo', no vale. En mi caso, la consigna es 'no leo, luego no existo'.
Estoy pasando por uno de esos momentos que se dan a veces en la vida por una extraña conjunción de astros _o porque yo solita me meto en demasiados líos, que es lo más probable_ en los que no tengo tiempo para nada. Y nada, es nada. Ni para leer aunque sea un sólo párrafo con los ojos cansados antes de dormir.
Por más que me estuviese resultado fascinante (como todo lo que escribe Matilde Asensi, que es quien espera ahora en mi mesilla pacientemente), no leo. Eso es todo. Mientras el tiempo pone de nuevo las cosas en su sitio, o en otro distinto pero estable, no leo... Y esaotra seguirá esperando...