esa otra que soy yoesa otra que soy yo

17/3/13

mi fuente de la juventud [poemas]

Te urgían los besos en la boca,
y a mi me ardían las manos por tocarte.
La ropa caía al suelo
antes de llegar a nuestro destino,
camas,
sofás,
pasillos,
la cocina con la sartén al fuego,
la playa con su sol y sus playeros,
y algún váter de bar de dudoso recuerdo.

El mundo era nuestro
y la pasión la única forma de vivirlo.

Con la mirada valiente
del que sabe que se equivocará en la vida,
contra corriente y contra medida,
me bastaba saberte cerca
para saber que podría.
No había miedo en mi corazón
ni arrugas en mi frente,
jóvenes y nunca famosos,
pero te tenía, amor,
esperándome para cada huída.

Pero la vida,
ah, la vida,
es tan sólo un pestañeo,
y en un abrir y cerrar de ojos,
nos adelantaron los recuerdos.
Todo va demasiado deprisa
y no lo controlo
y no lo entiendo
y me muero de miedo
y es demasiado largo este invierno.

Pero sigues ahí,
y, de pronto, me miras.
Y somos de nuevo aquel incendio.
La urgencia,
la fuerza,
la vida a zancadas,
la risa a carcajadas,
la despreocupación,
las ganas encendidas.

No me faltes nunca. Eres mi fuente de la juventud.

1 comentario:

Lôgän dijo...

Ese "somos de nuevo aquel incendio" y los versos que lo prosiguen han conseguido incendiarme hasta a mí. Sencillo, directo pero con mucha fuerza. Bravo